- Se ha comprobado que mezclar el 50 por ciento de gasolina, 49 de etanol y 1 por ciento de hidrógeno reduce hasta menos de la mitad las emisiones contaminantes.
Querétaro. La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) continúa a la vanguardia en materia de energías renovables, por ello, la Facultad de Ingeniería (FI) actualmente sigue trabajando en la línea de biocombustibles, de manera particular, en el uso del hidrógeno y etanol en motores de combustión interna.
De acuerdo con el Dr. Gonzalo Macías Bobadilla, profesor investigador de la FI, el trabajo está enfocado en la construcción de celdas de hidrógeno para la producción de dicho elemento in situ, las cuales se colocan en el compartimiento del motor del vehículo.
“Son poco invasivas y tienen una producción promedio de un litro de hidrógeno a temperatura ambiente a la presión atmosférica en la que estamos, el hidrógeno producido se introduce a través del múltiple de inyección del vehículo. Esto quiere decir que producimos el hidrógeno e inmediatamente se quema, no lo almacenamos porque es un gas inestable cuando se empieza a calentar, el tener un tanque para guardarlo y luego usarlo podría comprometer la seguridad y sería costoso, razón por la cual es mejor producirlo en función de la demanda del motor del vehículo”, afirmó el Dr. Macías Bobadilla.
Asimismo, refirió que al agregar este gas a la gasolina regular en combinación con el etanol, provoca que el auto tenga una mejor combustión y produzca menos gases contaminantes, entre ellos Óxidos Nitrosos (NOx) y Monóxido de Carbono (CO).
“Hemos demostrado que mezclar 50 por ciento de gasolina, 49 de etanol y 1 por ciento de hidrógeno, nos dan una solución óptima en donde se reduce hasta menos de la mitad las emisiones contaminantes, se obtiene un buen rendimiento de motor, incluso, este puede tener una mejor vida. Los combustibles que estamos usando producen menos contaminantes, por lo que su motor se mantiene internamente más limpio; incluso recientemente tuvimos la oportunidad de publicar estos resultados en la prestigiosa revista International Journal of Hydrgen Energy bajo el título: Using biohydrogen and bioethanol fuels in internal combustion engines to reduce emissios – la cual ostenta un factor de impacto 4.229 en el índice JCR”, destacó el académico.
Explicó que estas combinaciones pueden usarse en cualquier vehículo, ya que existen autos que soportan el 85 por ciento de etanol, al estar homologados de esta manera desde fábrica; sin embargo, dijo, la mayoría de los autos pueden utilizar mezclas en diferentes proporciones de gasolina, etanol e hidrógeno.
Para este tipo de pruebas, se utiliza un vehículo experimental propiedad de la Universidad, un Mitsubishi Galant de 3.8 litros, con más de 14 años de antigüedad y que fue restaurado para este propósito.