Por Víctor Manuel Sánchez Bandala
Una de las organizaciones gremiales con harta historia y reconocimiento político, por su origen y representatividad social, sin lugar a duda es la Confederación de Trabajadores de México, CTM, uno de los pilares del otrora poderosísima Partido Revolucionario Institucional, PRI.
Hoy aquí en la Entidad queretana, la CTM encara un inusual y traumático enfrentamiento, derivado del embuste, agandalle y ambición enfermiza de uno de sus actores más despreciados, precisamente por su actitud de codicia y altanería.
Tras la muerte de Don Exequiel Espinoza Mejía, dirigente que relevo en el mando cetemista a don Antonio Domínguez Trejo, también fallecido, el liderazgo de la central obrera queda en manos de Jesús Llamas Contreras, quién durante su periodo como dirigente cetemista fue “dejando caer” la fuerza de la CTM en Querétaro.
Más preocupado por negociaciones leoninas en favor del sector empresarial, que en defender y representar a su sector, el obrero, Llamas Contreras se mostró, de acuerdo a lo que se deja ver, como el clásico “líder corrupto” que tanto daño han causado a los trabajadores.
La CTM- Querétaro no sólo se sostuvo, durante muchas décadas, como una central obrera digna y representativa de los trabajadores a nivel estatal, junto con la FETQ y la CROC,, sino que logró armonizar el clima laboral queretano.
Gobernadores emanados de esa central como don Rafael Camacho Guzmán, sobre todo, dan singular valor al buen desempeño de un gobernante muy querido de origen trabajador, quién había surgido del STIRT.
En estos momentos, J. Cruz Araujo Ávila, “El Marino”, con el reconocimiento legal de contar con la “Toma de Nota” que lo acredita como el líder oficial de la CTM en Querétaro tiene que entrar en una confrontación legal contra el “gandallita” de Llamas Contreras por la simple necedad de este último en desconocer acuerdos y compromisos institucionales.
Llamas Contreras contra toda lógica y sentido común, se niega a entregar cuentas y pero aún, retiene contra la voluntad del sindicalismo obrero cetemista el edificio central de la CTM, bajo argumentos mañosos y mezquinos.
El conflicto en la CTM de Querétaro, no es lejano al interés de la región serrana ya que desde hace tiempo, el dirigente formal y reconocido J. Cruz Araujo Ávila promueve y desarrolla proyectos productivos en beneficio de comunidades de la zona norte del estado. Acciones que nunca se había dado con la anterior “dirigencia” encabezada por Llamas Contreras.
Es tiempo de que las autoridades laborales y del poder judiciales “pongan orden” a un conflicto que nunca debió existir si se hubiera ante puesto el respeto al historial que dejaron los fundadores del movimiento obrero cetemista en Querétaro, Antonio Domínguez Trejo y Ezequiel Espinoza Mejía (QEPD).
Total, Llamas Contreras no sólo ha traicionado al su central de origen la CTM, al formar hoy en día parte de otra central no tricolor, sino que además pretende “endosarle” a esa nueva organización, (Confederación de Trabajadores y Empleados de México, CATEM que encabeza el empresario y Senador por MORENA, Pedro Haces Barba), el edificio central que con tanto sacrificio y esfuerzo se elevó en favor del cetemismo queretano.