- Busca opiniones y perspectivas de diversos actores de la zona alta en relación a los símbolos, sitios, riquezas naturales, costumbres y tradiciones que deben ser sujeto de salvaguarda social y gubernamental.
Semidesierto queretano. Al pie del Pinal del Zamorano, el presidente municipal José Alejandro Ochoa Valencia y la Secretaria de Desarrollo Urbano y Ecología, María Cecilia Martínez Mancera dieron por inaugurados los talleres de consulta pública para la elaboración del Plan de Manejo Participativo PCI del Semidesierto.
Para tal propósito se congregaron debajo de un encino delegados de las localidades de la zona alta de Colón, vecinos, autoridades y especialistas, entre ellos, el cronista municipal Cristóbal Vega Prado, el cronista honorario don Jesús Solís; y la maestra Luz del Carmen Morales Montes de Oca, comisionada para la elaboración del plan.
El ejercicio de consulta busca extraer opiniones y perspectivas de diversos actores de la zona alta en relación a los símbolos, sitios, riquezas naturales, costumbres y tradiciones que deben ser sujeto de salvaguarda social y gubernamental.
Para lo cual será consultada la ciudadanía de los municipios de Colón, Cadereyta, Tolimán y Ezequiel Montes con talleres que se harán efectivos en el periodo comprendido entre diciembre del 2018 y enero del 2019 para después diseñar las estrategias y acciones que habrán de implementarse en septiembre.
Sobre este respecto, la Secretaria de Desarrollo Urbano y Ecología, María Cecilia Martínez Mancera apuntó al Pinal del Zamorano –considerado cerro sagrado-, las peregrinaciones, danzas y riqueza natural como los elementos que deben ser potencializados con ésta iniciativa.
“Queremos recoger de todos ellos lo que atesoran juntos que es nuestra cultura, razón de identidad y llevarlo a un plan estratégico en el que podamos trabajar las instituciones para que podamos preservar y sobre todo promover y difundir”, señaló.
Y en la misma tónica, el Presidente Municipal José Alejandro Ochoa Valencia enfatizó en su mensaje, la importancia de incluir las voces de los habitantes del territorio comprometido para que el resultado sea reflejo de las instituciones culturales, costumbres y tradiciones que han trascendido por generaciones.
«Yo quiero que lleguemos a esta consulta con la mayor apertura donde la gente nos diga las ideas importantes en el desarrollo de las comunidades.
«Vamos a sacar el mayor potencial en la vocación real de la tierra, darles una mejora al entorno y la infraestructura», prometió.
Por su parte el cronista honorario, Jesús Solís -participante del taller- puntualizó en entrevista que dicho territorio es rico en especies de plantas boscosas como fagáceas, robles, encinos, charrasquillos, pináceas y oyameles.
Y como actividades de arraigo enlistó la ganadería, curtiduría, herbolaria y apicultura, así como la producción de lácteos y cecina.