Apicultura:
Actividad económica de fuerte impacto social.
- La apicultura, es una actividad que llevan a cabo, como familia desde hace tres generaciones al menos, dice doña Virginia Flores Pedraza conocida productora y promotora de esa bonita e importante actividad.
- Con estudios para el trabajo agropecuario, doña Virginia ofrece los productos que elabora a partir de la miel de abeja y sub productos del néctar que recolectan diariamente miles y miles de nobles abejas.
La Mezclita, Jalpan de Serra, Qro. Entre el verde monte, gratamente húmedo por las recientes lluvias que se han dejado sentir en la región serrana, nos encaminamos, doña Virginia , su hija Ana Azucena y el MENSAJERO DE LA SIERRA GORDA hacia la “fabrica” de miel, llamado técnicamente -apíario- que viene siendo un “fabrica” integrada, en este caso por lo menos con cerca de una veintena de colmenas de abejas. Expresamente fuimos a conocer parte de esta importante actividad.
Como se sabe, los mayores polinizadores del mundo, las abejas forman parte de la biodiversidad de la que todos dependemos para sobrevivir. Proporcionan alimentos de alta calidad -miel, jalea real y polen- y otros productos como la cera de abeja, el propóleo y el veneno terapéutico de abeja.
Bajo la advertencia de evitar perfumes aromáticos y ropa oscura que atraigan o irriten a las abejas, luego de colocarnos los trajes de seguridad, incluyendo guantes, comenzó la visita de revisión de las colmenas.
La joven profesionista, Ana Azucena, inicio el encendido del ahumador,(aparato que se avienta humo) que es utilizado para ahuyentar a las abejas cuando se está trabajando en las colmenas entre miles y miles de esos insectos.
Siempre con las recomendaciones de doña Virginia el MENSAJERO DE LA SIERA con harto miedo, fue escuchando las explicaciones sobre los detalles de esta actividad y tomando fotos con mucho cuidado porque no se podían tomar gráficas por el grueso guante protector.
Cabe hacer notar que quién creó la apicultura fue François Huber, apicultor suizo ciego, quién con su libro “Observations”, fundó las bases de la ciencia apícola en 1792. Lorenzo L. Langstroth, inventó en Estados Unidos el marco móvil con paso de abejas de 9,5 mm y la colmena que lleva su nombre en 1851. En cuanto a la apicultura, para muchos historiadores se remonta al año 2.400 A.C. en el antiguo Egipto, mientras arqueólogos italianos localizaron colmenas de barro en la isla de Creta con una edad aproximada de 3.400 años antes de Cristo.
De acuerdo a doña Virginia Flores Pedraza quien desde el año de 1975 a 1979 estudio en la Escuela Nacional de Maestros con Capacitación para el Trabajo Agropecuario en Roque, Celaya, Gto., cada quince días se tiene que hacer trabajo en el apíario para revisar marco por marco, observar en cada marco o panal la existencia de alimento, huevos, crías de todas las edades, presencia de enfermedades, plagas o parásitos, generalmente iniciando con uno de la orilla.
Con gran cariño por esta actividad, ya que de algún modo las abejas siempre han estado relacionadas con la familia, desde mi abuelita, me gusta el trabajo que realizan(las abejas) y su importancia en la alimentación humana”, dice doña Virginia.
Actualmente, doña Virginia Flores Pedraza elabora números productos derivados de la apicultura, productos como jabones, cremas, pomadas velas de cera , polen y por su puesto miel 100 por ciento pura. Beneficios de la apicultura:
No olvidar que la polinización de las plantas en flor, salvajes o cultivadas, es indispensable para que la vida continúe sobre la tierra. Este proceso esencial es de un valor inestimable. A la gente de todo el mundo le gusta la miel: el más popular de los productos de la apicultura. Tradicionalmente, en casi todas las sociedades, la miel ha tenido una función medicinal y nutritiva. Ya sea comercializada a granel o envasada, la miel produce ganancias, y es capaz de crear medios de vida y desarrollo en varios sectores dentro de una sociedad. La cera de abeja es un producto importante de la apicultura. La mayor parte del abastecimiento mundial proviene de los países en vías de desarrollo. Los demás productos de la apicultura, como el polen, propóleos y la jalea real pueden ser comercializados, aunque se necesiten técnicas y materiales específicos para obtenerlos. Los apicultores y otros miembros de la comunidad pueden generar bienes usando la miel y la cera de abeja en la elaboración de productos derivados, tales como candelas, ungüentos para la piel y hasta cerveza. La comercialización de un producto derivado generalmente se traduce en mejores ganancias al productor que la venta de la materia bruta. vmsb. Felicidades.