Por Víctor Manuel Sánchez Bandala
Con la reciente reforma laboral, por primera vez, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, SNTE abre su proceso interno de renovación estatal, bajo una nueva dinámica de elección de su próxima dirigencia local. El relevo en la dirigencia de la Sección XXIV, no volverá a ser a través por el voto de Delegados, sino que será por la vía del voto secreto, directo y universal de trabajadores activos y jubilados.
Según se sabe, a nivel estatal la Sección XXIV cuenta con más de 17 mil afiliados, de los cuales 12 mil son trabajadores activos y cerca de 6 mil jubilados, todos ellos con derecho a elegir a su próximo Comité Sección.
Hasta el momento, existen al menos media docena de “aspirantes” a alcanzar la dirigencia estatal del SNTE que hoy encabeza Maurino Morales García, líder que tendrá bajo su responsabilidad garantizar, ya bajo las nuevas reglas sindicales de la reciente Reforma Laboral, equidad, libertad e imparcialidad en la renovación que tiene que darse a más tardar en diciembre del 2019.
Sin lugar a duda, la naciente Reforma Laboral, que entre otras cosas impondrá nuevas reglas de competición sindical interna para el SNTE, es una buena prueba para saber y conocer que tanto esta dispuesto el magisterio institucional en lograr su democratización interna.
El sindicalismo de esa organización gremial tendrá, por ley que modificar su proceso interno para elegir a su próxima dirigencia, dejando atrás prácticas de distribución de cuotas, Querétaro-san Juan del Río.
Hoy, incluso las mujeres tendrán la oportunidad da aspirar al liderazgo estatal que nunca se les ha “permitido” llegar, y en ese contexto, se sabe que la profesora, Consuelo Hernández Padilla, con amplia experiencia en cargos de representación sindical está siendo promovida por maestros de varias Delegaciones, incluyendo trabajadores y jubilados del SNTE del semidesierto y región serrana.