Piel desnuda. Por José Ricardo Sánchez.

Mi mano en tu espalda,

es tan breve ese espacio

en el cual quiero

posar este deseo:

si mi mirada te contempla

es porque ya he pecado.

Tu rostro de exquisita forma

es la piel que

mi desnuda alma

aún en este momento

ya sabe que quiero acariciar.

 Usted, mujer,

 la extraño en mi mente,

¡ no te vayas!

Si te olvido me muero.

Verificado por MonsterInsights